¿Para qué sirve un cubrebocas?

Una de las formas más comunes de evitar la propagación de infecciones y epidemias es mediante el uso del cubrebocas, el cual ayuda a prevenir la entrada de microorganismos al cuerpo.

Su uso se recomienda en momentos de infección viral, como lo son los resfriados y la gripe, ya que además de evitar el contagio entre personas, protege los pulmones al evitar los cambios bruscos de temperatura en el aire que respiramos.

Los componentes que conforman a un tapabocas desechable son:

• Paño: es la parte plisada que se ubica cubriendo la boca y nariz.
• Tira metálica: esta tira ayuda a justar al dorso de la nariz, debemos cuidar que siempre se encuentre en la parte superior.
• Tiras o bandas de ajuste: existen tapabocas que tienen tiras de resorte o caucho. Estas deben ser colocadas en las orejas para que se sostenga.

Al momento de colocar un cubrebocas se recomienda tener las manos lavadas y garantizar que la nariz y la boca estén perfectamente cubiertas. Debe ser lo más ajustado posible y permanecer puesto para evitar la contaminación.

Es recomendable hacer uso del cubrebocas en lugares con gran afluencia de personas o en momentos en los que se tenga contacto con una persona cuyo estado de salud es delicado.

De igual manera, puedes complementar el uso de los cubrebocas con Kleenex® ColdCare® Anti-Viral para evitar el contagio de la gripe, eliminando el 99.9% del virus de la gripe en el pañuelo.